Hasta el frontis de la Urgencia del Hospital del Salvador llegó el candidato presidencial Marco Enríquez-Ominami para defender la salud pública y rechazar el proyecto de ley presentado por el Gobierno que busca la creación de Hospitales Clínicos Concesionados.
Acompañado por un importante grupo de adherentes, su equipo programático de Salud, militantes del Partido Liberal y de movimientos independientes, el presidenciable señaló: “Estamos frente al Hospital del Salvador para defender la salud pública y proponerle a los chilenos una solución al desafío de este trasatlántico que es la salud pública. Lo primero es retirar la ley de hospitales clínicos, que es pan para hoy hambre para mañana. Estamos replicando el sistema de colegios particulares subvencionados que existe en el modelo educativo. El día de mañana, como estamos introduciendo el lucro en los hospitales públicos, lo que va a ocurrir es que se va a hablar más del lucro que de la enfermedad”.
Enríquez-Ominami agregó: “Este es un mal proyecto de ley porque además atenta contra los trabajadores. Va a precarizar a los trabajadores de la salud pública, los va a dejar en tierra de nadie, y peor aun, van a perder años de carrera”.
La doctora Oriele Núñez, integrante del equipo programático de Salud del presidenciable, acotó: “Consideramos que el derecho a la salud es un derecho universal, un derecho humano, un bien social y no estamos de acuerdo con el mercado de la salud, del lucro en la salud pública. Es por esto que no estamos de acuerdo con este proyecto de ley de hospitales concesionados, ya que limitará este derecho universal al copago por una prestación de servicio”.
El candidato presidencial PRO-PL-MSA y de movimientos independientes, enfatizó: “Cuando sea Presidente no solamente frenaré todo intento por privatizar la salud pública, sino que además promoveré más salud pública. Si se aprueba esta ley, tres hospitales van a pasar a este esquema y, lo que va a ocurrir, al igual que con la educación, es que les va a costar más caro y serán mal atendidos. Ya sabemos los que ha significado este modelo en educación y Transantiago, fórmula ideológica de la derecha y la Concertación que consiste en sacar al Estado de los deberes. Nosotros queremos más deberes para el Estado”.
“La solución de la salud pública no es la privatización, sino más salud pública. Hay problemas de gestión y eficiencia, pero no puede ser que sigamos entregando recursos públicos a privados, que tienen incentivos distintos. A un privado no le interesa el desafío sanitario, le interesa la enfermedad porque a través de esta puede seguir rentando. Nosotros tenemos otra lógica, proponemos una solución y por eso trabajamos para crear un Nuevo Chile, solucionado estos temas”.
Consultado sobre el caso de la menor de 11 años embarazada luego de ser violada de manera reiterada por la pareja de su madre, Enríquez-Ominami señaló: “A todos nos ha impactado este caso, es una tragedia. Dicho esto, el deber de un candidato a Presidente de la República es ofrecer una solución, además de la sanción que tiene que ocurrir por vía judicial. Para el Estado de Chile esta niña debe ser madre; para nosotros, los progresistas, esta niña debe ser niña. A mí no me parece que obliguemos a esta niña de 11 años a ser madre, no está apta física, psicológica ni afectivamente para serlo. Cuando sea Presidente, esta niña y su madre no tendrán la amenaza de la cárcel para tomar o no una decisión como el aborto terapéutico”.
El presidenciable agregó: “Le quiero decir a los conservadores que se equivocan, no estamos discutiendo si es bueno o malo el aborto. Estamos diciendo que la madre de la niña y el médico deben tomar una decisión sobre la base de una amenaza de cárcel”.
Tras la conferencia de prensa, el candidato presidencial recorrió algunas de las 100 plazas en las que el Partido Progresista, partido Liberal, Movimiento del Socialismo Allendista y adherentes independientes realizó banderazos y actividades de campaña a lo largo de todo el país.
Enríquez-Ominami recibirá mañana en un importante acto en su comando presidencial las más de 10 mil propuestas ciudadanas recopiladas durante los últimos meses por medio del programa Por Un Nuevo Chile.