El ex candidato presidencial trabaja en un documental en la región, pero también se dio el tiempo para hablar de política.
Locuaz y amable reapareció en la arena política, esta vez en Coyhaique, el ex candidato presidencial Marco Enríquez-Ominami, ocasión en la que visitó a medios de comunicación y aprovechó de compartir con el público en general, todo esto en el contexto de un documental que realiza. “Estoy retratando el momento anestésico que estamos viviendo”, dijo.
Enríquez-Ominami expresó que siente que la ciudadanía no se da cuenta de la importancia de la próxima elección donde se votará a favor o en contra del segundo proyecto constitucional para intentar cambiar la actual carta magna de la República.
El político y audiovisualista reconoce que la mayoría de los ciudadanos de a pie están fatigados con estas elecciones y que no hay una conexión con ellas.
“Esta es una elección mil veces más importante que una elección presidencial y le estamos dando menos interés. Creo que es normal, pero me interesa saber por qué”, partió expresando a Diario Regional Aysén en una conversación a la que accedió.
En contra
El ex candidato aclaró de partida que votará en contra de la actual propuesta constitucional. “No estoy dispuesto a amarrar a mi país por 50 años a las cadenas de las AFP”, dijo.
Las razones de su decisión apuntan a que cree que el actual texto que pretende cambiar a la actual constitución sólo divide al país. “Está hecho desde la revancha, el odio, la venganza por el primer texto que los chilenos rechazaron y la derecha que obtuvo una votación legítima escribió un texto con la extrema derecha odioso y tramposo”, indicó.
Enríquez Ominami indica que el trabajo de la convención constitucional es tramposo porque siente que nadie pidió este segundo proceso.
“Eso fue idea del Presidente de la República con la derecha, pero además el texto nos hace pelear y nos va a tener peleando 30 años. Nunca voy a aceptar un texto que no reconozca que los que creen en Dios y los que no creen en Dios tengan los mismos derechos”, dijo.
Sobre lo mismo expresó que cree que es un texto que “humilla a las mujeres”, pues no reconoce el aborto en caso que una mujer sea víctima de una violación. “Habla de derechos sociales, pero amarra los derechos al privado que abusa como las AFP que pagan malas pensiones”, apuntó.
Una farra
El político dijo que hay nuevos temas en el tapete social y esos son la baja de la economía y la sensación de inseguridad en el país y que la necesidad de contar con una nueva constitución pasó a un segundo plano.
“Hay que enderezar la economía, crear empleo, controlar la seguridad y esto nos desvía y nos hemos gastado 250 mil millones de pesos en ocho elecciones en cuatro años y estamos peor que antes del estallido”, dijo.
“Yo fui promotor de un gran proceso constituyente y hoy digo basta. No sigamos con un texto que nos va a tener 50 años paralizados”, concluyó Marco Enríquez Ominami.
Insistió también: “Dos procesos constituyentes en 18 meses, después de 200 años sin proceso es una farra. Yo propongo en el corto plazo crear empleo, a través de un plan de obras públicas que va a reactivar la economía a corto plazo. A mediano plazo, derechos, y a largo plazo cambiar el modelo de desarrollo”.
Añadió que un tercer proceso sería “perdernos en un bosque si no estamos de acuerdo si ya estamos divididos”.
Reformar es más fácil
Al ser consultado sobre las diferencias que ve sobre la constitución actual y la que se está proponiendo ahora, Enríquez-Ominami no dudó en expresar que es más fácil reformar la actual que la que se propone.
“La antigua hoy se requiere cuatro séptimos para acuerdos y la nueva cinco séptimos, primer gran diferencia. Lo segundo, la nueva exagera lo que ya era malo que es que todo Chile está girado hacia el mercado”, explicó.
“Hay una trampa. Esta constitución dice que el Estado debe cuidar la vida de quien está por nacer. Suena lindo, pero eso está diciendo que la religión decide cuándo comienza la vida y la ciencia dice que es 14 semanas. Esta nueva constitución le cree a la religión y yo creo que en una constitución que debe respetar las religiones también se debe respetar la ciencia”, opinó.
El progresista cree que si el próximo 17 de diciembre gana el a favor José Antonio Kast será el futuro nuevo presidente de Chile y añadió que él se opondrá con todo para que eso no suceda.
Sobre la Región de Aysén, Enríquez-Ominami indicó que no es posible que sea sólo pesca, aparatos públicos y servicios. “Hay más. Es una región linda, es como un país, tal vez no de los más lindos del mundo”, dijo.
Sobre el polémico caso del abogado Luis Hernosilla y las coimas al Servicio de Impuestos Internos, dijo: “Es un caso burdo y grotesco. Llevamos años en un juego de máscaras”.
A consultarle acerca del Presidente Gabriel Boric, manifestó: “Este presidente tiene buenas intenciones, pero hace un mal gobierno”.
Fuente: Diario Regional Aysén