El progresismo latinoamericano debe aprender del modelo de México, con la “aplastante” victoria de Claudia Sheinbaum en las elecciones del domingo, que defendió un proyecto político “contra la
frustración”, dijo a la Agencia Sputnik el excandidato chileno y uno de los fundadores del foro político y académico de la izquierda latinoamericana, Grupo de Puebla, Marco Enríquez-Ominami.
“La izquierda debería aprender del modelo mexicano. (…) (El presidente) Andrés Manuel López Obrador y Claudia (Sheinbaum) lograron una enorme excepción, que fue defender un modelo contra la frustración. Eso no pasó en Italia, en Argentina, es lo que no sucedió en varios países en los que la frustración le ganó al modelo de desarrollo. Y creo que en eso México se vuelve un ejemplo incluso mundial, porque la arremetida de la derecha llega hasta que se topa con un líder capaz de entender que los votantes no se mueven por ignorancia sino que por frustración”, expresó.
Enríquez-Ominami, quien formó parte de la delegación del Grupo de Puebla que viajó a México para las elecciones y se reunió con la presidenta electa, dijo que el progresismo debe entender que fenómenos como el presidente de Argentina, Javier Milei, el exmandatario brasileño Jair Bolsonaro
(2019-2022), la líder del Consejo de Ministros de Italia, Giorgia Meloni, o el expresidente estadounidense Donald Trump (2017-2021), tienen un “elemento común” que es la”frustración”.
“No es un voto ignorante, es un voto frustrado. La gente participa de los modelos educativos, pero está frustrada. Y creo que en eso, encadenarse con un proceso histórico, construir un sentido en un proyecto político, defender con fuerza la dignidad y la libertad, es un talento. Mezclado con
liderazgos fuertes. Claudia Sheinbaum confrontó a la derecha en sus debates presidenciales. No renunció a la confrontación.
Un debate que tenemos en la izquierda latinoamericana es la confrontación. Hay quienes no les gusta la confrontación. Y yo creo que es una pregunta que ya está respondida. Hay que
confrontar”, agregó.
Sheinbaum, la candidata oficialista de la coalición encabezada por el Movimiento de Regeneración Nacional, triunfó el domingo en las elecciones presidenciales de México con un rango de entre 58,3 por ciento y 60,7 por ciento de votos, según el conteo rápido anunciado por la presidenta del Instituto Nacional Electoral (INE), Guadalupe Taddei.
“El mensaje que deja este aplastante triunfo de la izquierda en México es que la derecha no logra la misma respuesta que el progresismo. México es una excepción a nivel continental. No solamente logra reelegirse, sino que amplía la diferencia en gobernaciones parlamentarias, alcaldías. Yo creo que es un proyecto político, no solo un liderazgo, de los pocos que hay en América Latina”, reflexionó Enríquez-Ominami.
RELACIÓN CON AMÉRICA LATINA
Por otro lado, Enríquez-Ominami dijo que la victoria de Sheinbaum “abrirá más puertas a América Latina y al sur”.
“La relación entre México y América Latina va a seguir profundizándose mucho más. Incluso Claudia Sheinbaum, durante una reunión que mantuvo con integrantes del Grupo de Pueblam, confirmó que tiene enorme interés en construir con América Latina”, agregó.
Con respecto a la futura relación que mantendrá el Gobierno liderado por Sheinbaum con EEUU, consideró que será “díficil”, pero afirmó que tanto ella como López Obrador se enfrentaron con “mucho talento” a Biden y a Trump.
“Ellos tienen un doctorado en relaciones con EEUU, que desde el sur nos cuesta entender porque no tenemos frontera con Washington. Creo que a veces al mundo progresista se nos olvida que la frontera es de 3.000 kilómetros”, agregó.
Consideró que México ha optado en los últimos años por ser “protagonista”, llevando su propia agenda en la cumbre del Grupo de los Veinte (G20) y en la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).
La delegación del Grupo de Puebla que fue a las elecciones en México también estuvo conformada por los exmandatarios Evo Morales (Bolivia, 2006-2019) y Alberto Fernández (Argentina, 2019-2023).
(Sputnik)