Invitado por el alcalde de Pozo Almonte y recibiendo el cariño de cientos de peregrinos que se acercaron a saludar y expresar su apoyo, el candidato presidencial Marco Enríquez-Ominami participó hoy de la tradicional misa de la Virgen de La Tirana.
El presidenciable, quien llegó a la localidad como parte de su gira por el norte del país, señaló: “Estoy muy contento de estar acá como uno más. Quiero un Nuevo Chile, sueño con un país distinto, un país que integra distintas miradas, distintas creencias. Acá hay alcaldes y concejales que pertenecen a una visión común, entonces es triplemente reconfortante”.
Respecto del brote de influenza que afecta a la zona, Enríquez-Ominami señaló: “Creo que el Gobierno estuvo atento a esta situación de la influenza, pero me hubiese gustado más anticipación. Aún no podemos realizar balances, pero sí destaco que estuvo atento. Es por esta razón que ayer vine a proponer un camino y a estar atentos promoviendo una Agencia Nacional de Medicamentos y un Laboratorio Público de remedios. Chile compra los medicamentos a altos precios en el extranjero y lo mismo sucede con las vacunas. Este es un tema de Estado, pero por sobre todo de acceso oportuno y a preciosa razonables”.
“El balance deben hacerlo a partir de ahora. Lo digo con elegancia, me hubiese gustado más anticipación, esto pudo haberse previsto. Todos sabemos que el 16 de julio tenemos esta fiesta, y que se demoraron, fueron lentos, pero reaccionaron. Yo quiero un Nuevo Chile, y el Nuevo Chile requiere de eficiencia en acción y cambios de reglas”.
Consultado sobre los proyectos para modificar el sistema binominal, el candidato señaló: “Nosotros queremos un Congreso unicameral, con 150 congresistas; proponemos eliminar el Senado, garantizar la representación de las regiones, con parlamentarios más eficientes y representativos. Es un sistema electoral proporcional competitivo, hemos hecho una propuesta, se la hemos entregado al Gobierno y creemos que las propuestas del Senado y del Gobierno son impresentables, porque lo que hacen es cambiar la Cámara de Diputados y no el Senado. Es una trampa, igual que la de 1989, es el gatopardismo, hacerle creer a los chilenos que vamos a cambiar algo para que nada cambie. Atentos chilenos y chilenas, nos están invitando a una trampa que ya conocemos, que es hacer un pequeño cambio cosmético para que nos calmemos. En Chile queremos simplemente una democracia, democracia en salud, en previsión, en educación, una democracia de verdad”.
Respecto de la designación de determinados postulantes al Congreso por parte de las cúpulas de distintos partidos, el presidenciable culminó: “Lo que están haciendo con ustedes en regiones al designar candidatos a dedo –habiendo existido primarias– es una vergüenza. Es un patronazgo de Santiago que perjudica directamente a las regiones. He recorrido 8 veces mi país en los últimos tres años y las regiones no las respetan, sólo las necesitan para producir energía eléctrica y extraer cobre. Yo le propongo al norte otro trato, que sea un lugar turístico, científico, investigativo, cultural, no solamente extractivo. Es una falta de respeto mandarles termoeléctricas y candidatos designados por secretaría”.