Hasta el Centro de Justicia de Santiago llegó el candidato presidencial Marco Enríquez-Ominami para dar a conocer sus compromisos programáticos tendientes a mejorar el sistema de cárceles, disminuir el hacinamiento y fortalecer los sistemas alternativos a la privación de libertad.
El presidenciable del Partido Progresista, Partido Liberal y movimientos independientes realizó los anuncios acompañado por el ex vocero de la Fiscalía Oriente y candidato parlamentario Mario Schilling, la encargada programática Patricia Morales y por Karen Doggenweiler.
El presidenciable señaló: “Al igual que a todos los chilenos nos conmueve la tragedia, pero también la tragedia de los condenados, que también tienen derechos. Pensamos en especial en la cárcel de San Miguel y más recientemente en la Cárcel de Quillota, recinto que visité y cuyo hacinamiento denuncié cuando fui diputado por esa ciudad”.
“La condena supone también rehabilitación por parte del Estado. En los últimos 12 años la cantidad de presos ha aumentado en un 60% y ningún chileno está 60% más seguro. No basta con la mano dura ni con asegurar que se le acabará la fiesta a los delincuentes, porque lo que hoy tenemos es una tragedia en las cárceles. La demagogia tiene un límite”, agregó.
Enríquez-Ominami anunció sus compromisos programáticos: “Hoy hemos venido a proponer hacer de las cárceles espacios de rehabilitación y mejorar los sistemas alternativos de cumplimiento de penas, donde hay muchos vacíos y precariedades. A su vez, fortalecer a Gendarmería, que juega un rol fundamental en este desafío. Proponemos además avanzar en la sana asociación entre el Estado y las empresas para la reinserción”.
“Hay quienes dicen ‘que los presos se pudran’. A no equivocarse. Un chileno o chilena privado de libertad es un sujeto de derechos y uno de ellos es el derecho a la rehabilitación. Sí a la mano dura, pero sí también a la mano inteligente”, enfatizó.
Mario Schilling complementó: “Durante 20 años de la Concertación y 4 de la Alianza lo único que hemos tenido es incremento de la delincuencia y no soluciones reales. Quienes hemos vivido la profesión de combatirla queremos que haya propuestas reales, no con demagogia que buscan el voto fácil”.
Debate económico
Consultado sobre la polémica entre los comandos de Bachelet y Matthei sobre el gasto público, el candidato presidencial señaló: “Me parece un debate impropio. Este es un país en el que la mitad de los chilenos gana menos de $400 mil. Lo que se requiere es más audacia fiscal. Responsabilidad y audacia. Están peleándose por ver quién fue el que menos gastó. Ninguna reforma tributaria que recaude menos de 5 mil o 7 mil millones de dólares va a poder abordar con justicia los temas de educación, salud y seguridad. En los próximos días daremos a conocer una reforma que pretende recaudar 5 puntos del PIB, cercana a los 13 mil millones de dólares. Somos más ambiciosos”.
Sobre este mismo punto agregó: “Esta es una gran tomadura de pelo, es una niñería. Es un truco. No están polemizando sobre los temas de fondo, son detalles. Nos están tratando de enredar en estas peleas que yo llamo la cachetada del payaso”.
Consultado sobre las críticas a su propuesta de impuesto a la riqueza por parte de José Ramón Valente, integrante del equipo económico de Evelyn Matthei, respondió: “Esto se trata de un 1% a los activos financieros que superen el millón de dólares y que no consideran la vivienda. Alguien comparó esto con lo que sucede en Francia. Quiero recordarle a este economista que la discusión en Francia no es del 1%, sino que del 75%. Comparar a Chile con Francia en materia tributaria es comparar peras con manzanas. Con mucho respeto, tengamos un debate riguroso”.