Cuatro años, dos procesos constituyentes y tres plebiscitos. El ex candidato presidencial Marco Enríquez-Ominami (MEO) hizo un áspero balance de la vía de cambio constitucional que adoptó el país en 2019 y que culmina hoy. Tras votar en el Liceo 7 de Providencia, ME-O afirmó que la clase política y los parlamentarios “se farrearon una oportunidad histórica”. A partir de mañana lunes, agregó, “se desbloquea Chile” y “se abrirá un camino para enderezar la economía, el empleo, la seguridad”.
Cuatro veces candidato a la presidencia, hace una semana ME-O definió que votaría en contra. También aseguró que un triunfo del A favor conduciría a José Antonio Kast a la Presidencia. “Estoy convencido de que hay un camino que lleva directamente a la presidencia a los ultraconservadores, a la ultraderecha, pero ese no es el punto. El punto es que nos farreamos una oportunidad. Las autoridades tendrán que hoy día en la noche hacerse una dura autocrítica: son 250 mil millones de pesos, ocho procesos electorales, tres plebiscitos, dos procesos constituyentes en 15 meses para terminar peor que antes”.
En un “día difícil”, como describió esta jornada, dijo que “el voto va a permitir desbloquear, la economía de Chile se jodió y hay que enderezarla”.
ME-O sostuvo que “mañana el gobierno tendrá que asumir que no va a hacer las reformas que propuso. Es un gobierno que va a tener que hacer dos cosas, que están en las dos Constituciones en juego: control del orden publico y enderezar la economía. Punto. Cualquier otra cosa sería perder tiempo. La agenda transformadora, se perdió; no se hizo el primer año, no se hará nunca”.
Pidió a la oposición un espíritu colaborativo y la consideró “corresponsable” de la situación que atraviesa el país: “El hecho es que no va a haber lo que nos prometieron, ni unidad, ni amor, nada de eso”.
El excandidato afirmó que “el segundo proceso fue un invento del gobierno y la derecha”, y se arrogó el no haber participado del acuerdo del 15 de noviembre de 2019. “No suscribí el Acuerdo de Paz, soy el único líder nacional que no lo sucribió, y fíjense que no me equivoqué. Cuatro años despues tuve razón. Lo que hay que hacer ahora es construir”.
Fuente: La Tercera