Un fructífero diálogo fue el que sostuvieron Marco Enríquez-Ominami con representantes de la campaña Marca Tu Voto. En la instancia, a la que asistieron adherentes, artistas, abogados y representantes de diversos movimientos sociales, hubo acuerdo unánime en que la actual Constitución debe ser reemplazada por otra a través de una Asamblea Constituyente. En la ocasión, Enríquez-Ominami se refirió también a otros temas de contingencia.
Iván Couso, Coordinador de Marca Tu Voto, explicó: “Hemos invitado a Marco a que se manifieste respecto a esta iniciativa Marca Tu Voto. Estamos llamando a la población y los electores a marcar el voto para una Asamblea Constituyente en las elecciones del 7 de noviembre. Marco es el primer invitado que se ha manifestado a favor de esta iniciativa”. Couso agregó: “Debemos dar las gracias al Presidente del Consejo Electoral, quien aclaró que un voto marcado es un voto válido”.
La Presidenta del Partido Progresista, Patricia Morales, quien también participó del diálogo junto con el Secretario General del PRO Camilo Lagos, añadió: “Hace tiempo que consideramos que es necesario un cambio en la Constitución a través de una Asamblea Constituyente. Esto para cambiar las leyes de este país y que el Estado garantice una serie de derechos universales como la educación, la salud y una pensión digna para todos. Quiero hacer un llamado a las autoridades y a los otros partidos a comprometerse y respetar a aquellos ciudadanos que marquen el voto, que esta marca sea válida y se pueda contar el número de personas que apoyan una Asamblea Constituyente”.
Por su parte, Marco Enríquez-Ominami señaló: “Quiero decirle a los chilenos que cuando pagan la cuenta de la luz no se olviden nunca que si la pagan con dolor porque es muy cara, es por culpa de la Constitución. La Constitución es la que ha hecho que tengamos un sistema eléctrico con cero intervención del Estado.
“La Constitución del 80 la hizo Pinochet para él y sus amigos, dejando gente afuera. En 2013 no cabemos todos los chilenos, entre ellos, los pueblos originarios. Hay que construir una casa nueva donde quepamos todos los chilenos, con nuestras diferencias, con nuestras lenguas e idiomas, con nuestras culturas y nuestras identidades. Y esa nueva casa yo propongo que la construyamos todos juntos, a partir del 17 de noviembre, todos juntos marcando el voto. Es tan simple como eso, y es totalmente válido, legal, correcto y de sentido común”, agregó.
El candidato enfatizó: “La elección presidencial no es solamente discutir de los bancos y la tasa de interés. También hay que discutir las reglas. La Constitución fija las reglas, dice si vamos a tener más mercado o más Estado, dice si el cobre va a ser chileno o no. Nosotros proponemos que tenemos derechos y es por eso que he venido a apoyar esta iniciativa desde mi candidatura presidencial”.
Respecto del apoyo de otros precandidatos a esta iniciativa, el presidenciable del Partido Progresista y otros movimientos independientes señaló: “Yo no sé cuál va a ser la respuesta de los otros candidatos. Sé que los partidos de la Alianza y la Concertación no están de acuerdo con eso. No han hecho ningún esfuerzo por la Asamblea Constituyente. Confío poco, porque conozco la lógica de sus parlamentarios, de los cupos, de la desesperación por la reelección y es muy extraño que los candidatos no tengan una reflexión sobre la Constitución”.
“Las regiones debiesen ser las más interesadas en un cambio en la Constitución porque esta dictadura metropolitana se ejerce desde la Constitución. Lo que ha hecho que las regiones sean humilladas es la Constitución. Espero que Bachelet, Gómez, Velasco y Orrego se sumen y que la derecha entienda que nosotros no vamos solamente por ganar una campaña electoral. Queremos derrotar a los conservadores, creemos que Chile está preparado para un cambio constitucional”, agregó.
Reforma educacional
Consultado sobre el proyecto educacional propuesto por la precandidata Michelle Bachelet, Enríquez-Ominami señaló: “Me pasa algo terrible con estos anuncios, yo no les creo. Porque en 2008 con la Ley General de Educación hicieron exactamente lo contrario. En 2006 y 2007 teníamos mayoría en la Cámara de Diputados para haber hecho una reforma tributaria y haber defendido los liceos públicos y no quisieron hacerlo, por lo tanto, no les creo”.
Sobre el mismo punto, el candidato agregó: “Mi propuesta en educación se diferencia con la de ella en que nosotros no hablamos de un derecho social, hablamos de un derecho universal. No estamos de acuerdo en que los pobres deben demostrar cuán pobres son para acceder a un subsidio, una beca o un crédito universitario. Proponemos nosotros que sea un derecho para todas las chilenas y chilenos, ricos o pobres. La educación será gratuita y un derecho universal garantizado, no un derecho social”.
Renuncia de ministros
Finalmente, y consultado sobre la salida de dos ministros el gabinete de Sebastián Piñera, Enríquez-Ominami concluyó: “La derecha está angustiada, el país está enojado con ellos. Se farrearon la oportunidad. Todo ha sido traumático, el post natal, la ley de presupuesto, el sueldo mínimo, la educación. Este es un Gobierno que hizo que 40 mil jóvenes repitieran el colegio en 2011 por las protestas y demandas educacionales. La salida de ministros es legal, pero sintomática de angustia, porque saben que no hay mucho que hacer para revertir una tendencia. La mayoría de los chilenos, no todos, queremos un cambio, y Lavín con Cruz-Coke es defender candidaturas conservadoras. La vez pasada, en 2009, competí con 18 ministros haciendo puerta a puerta, y no me produce ninguna angustia”.