El ex diputado y candidato presidencial, Marco Enríquez-Ominami, estuvo en La Prueba de ADN y realizó un análisis sobre el momento que atraviesa el Gobierno conforme a las diferentes polémicas y los últimos casos conocidos.
Comenzando el 2024, se mantienen los análisis y balances en torno a los avances, retrocesos y trabajos concretos por parte del Gobierno. Pero también influye de manera negativa cada situación que se va destapando y generando incertidumbre.
Uno de los últimos temas sobre la mesa fueron las reuniones en la casa de Pablo Zalaquett saltándose los efectos de la Ley del Lobby, algo para lo que el invitado fue muy crítico.
“El pecado está en que él está registrado como lobista y que hace una tertulia que no se registra (…) lo feo es que sea un lobista que invite y nos quieran convencer de que era una ‘reunión de vecinos’”, comenzó cuestionando.
Asimismo, apunta a que los involucrados “son animales políticos de primer nivel, conocen la ley”, por lo que “la buena fe hubiese sido que hubieran transparentado”.
Haciendo un análisis más en general por cómo se han llevado las cosas, MEO comentó que “aquí siempre las explicaciones son peor que el error”, apelando a cómo se dieron las respuestas por parte del Gobierno.
Conforme a esto, y yendo a la raíz del asunto, además de no haber informado la reunión apegándose a la Ley de Lobby, “la pregunta es por qué los ministros no lo recibieron en el gabinete”.
Críticas directas al mandato
Siguiendo en la línea crítica, Enríquez-Ominami fue un paso más allá de todo lo relacionado al Lobby y realizó un análisis del momento que se atraviesa en La Moneda.
Enfatizó en que deben asumir un nuevo rol conforme a los años que le quedan en el mando, apuntando a que no se lograron hacer los trabajos que tenían previsto.
“Yo creo que ya da lo mismo el Gobierno en materia de reformas. Se acabó el Gobierno en materia de reformas”, sostiene, asegurando que es poco probable que se realice lo prometido en esta arista. “Lo que no haces en el primer año, no lo haces nuca”.
“Dije las cosas en el debate del 2021 y creo que lamentablemente tuve razón; este era un Gobierno sin convicciones. Y me propuse defenderlo en este programa, cuesta, porque es un programa sin convicciones”, señaló.
Un reajuste en el foco
“Quedan dos años y yo quiero preguntar ¿Qué le ha parecido la reforma educacional, la reforma de salud, la reforma previsional, la reforma tributaria y la reforma política?”, añadió sentenciando que “no hay reforma”.
Así, le pidió al Gobierno “que cambie su agenda, que renuncie -a lo propuesto- y transparente que no va a haber ninguna reforma. Ya no es un Gobierno transformador tendrá que cumplir con la Constitución”.
MEO hizo hincapié en que desde La Moneda deben comenzar a regirse única y primordialmente a lo establecido en los textos y normas constitucionales conforme a las labores presidenciales.
“El texto del ‘80, del ‘22 y el del ‘23, dicen todo lo mismo: el Presidente tiene como tarea el orden público y, a mi juicio, crear empleos”, complementó.
Fuente: ADN