Acompañado por parte de su equipo de asesores programáticos, el candidato presidencial Marco Enríquez-Ominami visitó el Museo de Artes Visuales, compró libros usados y recorrió el barrio Lastarria. Esto en el marco del Día del Patrimonio.
Junto con plantear una serie de propuestas en el área de cultura y patrimonio, e presidenciable se refirió también a otros temas de contingencia.
“En el Día del Patrimonio hemos querido marcar varios puntos. Uno es el patrimonio entendido no como la administración del pasado, sino como la administración del futuro. Está el patrimonio tangible y el intangible, y en esta materia, esta declaración del Día del Patrimonio es un progreso”, señaló Enríquez-Ominami. “Debemos incentivar la alianza público-privada para administrar edificios de alto interés patrimonial. Como leí por ahí, el futuro es el pasado de nuestros hijos. Cuando uno habla de patrimonio está construyendo el pasado de nuestros hijos”.
“Invitamos al Gobierno en estos últimos meses a zanjar esa vieja demanda de un Ministerio de Cultura con plenas atribuciones, no como hoy que es un servicio público, con rango de ministerio, lo que no es preciso para los efectos que requiere la cultura que es tan deficitario. El presupuesto en cultura hoy es una vergüenza. Si uno compara el monto gastado en cultura frente al monto gastado en armas o el equivalente de un bono frente al presupuesto de cultura total, es para escandalizarse. Proponemos, al menos, duplicar ese monto y presupuesto de cultura, que sigue siendo todavía muy pobre”, agregó. Respecto del IVA al libro, el presidenciable propuso: «Vamos a bajar el IVA al libro y, por qué no, eliminarlo. A su vez, crear una biblioteca pública con fuerte poder comprador de libros”.
Andrés Solimano, encargado del programa económico de su candidatura, señaló: “El presupuesto de cultura es ínfimo. En el mensaje del 21 de Mayo no hubo mención al tema de cultura. Aparentemente no es una gran prioridad. El libro, por ejemplo, como elemento esencial de cultura es carísimo. Se debería pensar en replicar experiencias como una editorial pública, que pudiera producir masivamente libros precios accesibles para una gran masa de la población. Por otra parte, en el programa de adulto mayor establecemos accesos gratuitos a bibliotecas, museos y exposiciones para la población adulta. Debemos replicar el día de hoy los 365 días del año. Hay que empezar a democratizar la cultura de una vez por todas, ya que el país no puede pretender ser desarrollado, si la cultura ocupa tan bajas políticas públicas”.
Por su parte, Rodrigo Chauriye, encargado del área de Viviendo y Urbanismo, complementó: “Hoy a una persona que es dueña de un monumento no le queda más que esperar a que se caiga a pedazos. Es necesario crear incentivos más importantes para que instituciones compren edificios patrimoniales, los mantengan y con el compromiso a abrirlo a la comunidad”.
Consultado sobre el apoyo del PC a la precandidatura de Michelle Bachelet, Marco Enríquez-Ominami señaló: “Pasamos de la Nueva Mayoría a la Nueva Pillería. Es una pillería sistemática. Se nos dijo que lo importante era el programa, que eran relevantes las primarias, que nunca más habría pactos sin contenidos. Es una pena que el Partido Comunista –teniendo tradición de lucha, historia de convicción, de resistencia a la dictadura– termine por un cupo más en el Parlamento, renunciando al debate, a la educación pública, a poner por delante sus convicciones. La dirigencia comunista no le hace honor a la historia de su partido”.
“Esto de proclamar candidatos en ausencia, sin siquiera haberle visto la cara a su candidata, después de que nos dijeron durante 20 años que al PC le cargaba la Concertación, que eran lo peor de la política, terminan por un cupo más. A 6 meses de la elección este es un acto de renuncia. Lo que ha hecho el PC es renunciar a la política, renunciar a la convicción”, agregó.
Finalmente, y consultado sobre la existencia de debates televisados, el presidenciable del PRO y otros movimientos independientes concluyó: “Me parece bien que hagan debates. Tardío, pero bien. Quiero advertir a los comandos presidenciales que nosotros no nos vamos a prestar para tongos. Nosotros exigiremos más de un debate, debates con contraplanos, con réplicas, debates como corresponden, no debates del miedo, de la paranoia de un comando”.