El excandidato a presidente de Chile, Marco Enríquez Ominami, afirmó que el aumento en las tarifas del subte fue efectivamente el detonante de la crisis que estos días afecta al país con actos de violencia, incendios y choques con la policía que causaron al menos 18 muertos. Sin embargo, aclaró que en realidad «no son 30 pesos, sino 30 años de una democracia agotada».
En diálogo con la agencia Télam, el líder del partido Progresistas admitió que la revuelta ciudadana originada en el aumento tarifario «no la esperaba nadie», pero se explica en el hecho de que «la libertad sin dignidad no es libertad; la libertad con sueldos mínimos de 150 dólares, no tiene sentido».
En este sentido, Enríquez Ominami opinó que la situación y el dolor por los muertos y los heridos es muy reciente como para evaluar el destino de este movimiento. «Alguien dijo por ahí que no son 30 pesos, sino 30 años; treinta años de una democracia agotada, que en algún momento iba a provocar una reacción, aunque es cierto que no siempre un voto de protesta es un voto de propuesta», expresó.
«Esta es una democracia representativa con enorme ausentismo, y es cierto que las mayorías sociales no siempre son mayorías políticas, y los grandes momentos como este no siempre desembocan en un gran momento político», agregó.
El dirigente consideró que este conflicto puso sobre la escena política un gran plebiscito sobre la justicia social y el orden. «Lamentablemente, el árbitro de este plebiscito -el presidente Piñera- ya decidió no ser empático con una de las partes», sentenció.
Fuente: TN